¿Compensación excedentes de autoconsumo o venta de energía solar a la red?

2 may 2022
Instalar placas fotovoltaicas ya de por sí es una buena inversión por los beneficios que conlleva pero, ¿sabes que puedes sacarle aún más partido? Hoy te lo contamos.
¿Compensación excedentes de autoconsumo o venta de energía solar a la red?
Contar con una instalación fotovoltaica en tu hogar se traduce en ahorro en tu factura de la luz. Pero, ¿sabías que puedes sacarle beneficio? En España existen dos opciones para sacarle más ventaja a tu instalación: compensación por excedentes de autoconsumo y venta de energía.

Como sacarle más partido a tu instalación fotovoltaica: venta o compensación de excedentes de autoconsumo

Gracias a la nueva normativa RD244/2019 donde se incluyen los cambios para el autoconsumo, encontramos las normas para el sistema de compensación de excedentes del autoconsumo. Las instalaciones solares necesitan una alta inversión, por lo que con la compensación puedes conseguir reducir un poco tu factura para así sacarle más beneficio. 
Es importante recordar que son excluyentes, no podrás combinar ambas a la vez. Sólo puedes escoger una u otra, así que es importante que elijas la opción que mejor se adapte a ti y a tus necesidades. 
Por una parte, tenemos la compensación de excedentes de autoconsumo. Con esta modalidad, vertemos la energía que nos sobra a la red y la comercializadora te compensa por ello. En cada factura recibirás un descuento por tu compensación con un límite. El máximo que pueden compensar es el coste de tu consumo de energía —sin contar con los costes fijos—.  
La segunda opción es la venta de excedentes, lo cual no tiene compensación. Con esta modalidad, venderás la energía que viertas a la red. A diferencia de la compensación de excedentes de autoconsumo, aquí recibirás dinero a cambio de tu energía.

Ventajas e inconvenientes de la compensación de excedentes de autoconsumo

¿Y qué pasa si vertemos más energía de la que consumimos? Por desgracia, no se acumula. Es decir, una vez llegues al coste de tu consumo, la comercializadora se quedará con la energía sin darte nada a cambio. Será beneficio exclusivo de la compañía. 
Recuerda que el valor de la energía que consumes no es el mismo que el de la que viertes a la red. Por ejemplo, si pagas 0,15€/kWh —0,09€ para la energía, 0,06€ en concepto de peaje y que no será reducido— significa que valorarán tu energía en 0,05€/kWh. Es importante que tengas en cuenta que la energía que compramos es más cara de la que vendemos. 
Solo existen dos requisitos para adherirse a esta modalidad: energía 100% renovable y potencia inferior a 100kW. Las empresas instaladoras suelen realizar el papeleo por ti para que no tengas que tramitar nada. Ellos se encargan de los papeles y tú recibes la compensación en cada factura. ¡Más sencillo imposible!

Ventaja e inconvenientes de la venta de energía

Para poder utilizar esta modalidad debes formalizar un acuerdo de representación con cualquier comercializadora o darte de alta como productor. La última opción requiere mucho más papeleo y trámites que la primera. Ambas opciones traen obligaciones fiscales y tributarias que debes declarar en tu renta. 
Necesitarás el permiso del ayuntamiento para poder darte de alta. Una vez lo tengas, deberás dar de alta en la Agencia Tributaria el impuesto de electricidad. Si vas a regístrate como productor, necesitas registrarte en el registro administrativo de producción —RAIPRE—. Por el otro lado, si eliges la opción del acuerdo de representación, tendrás que presentarlo además del contrato de venta de energía con tu comercializadora.